Este libro expone los resultados de una investigación sobre el pensamiento social en una muestra de estudiantes de cinco licenciaturas: Administración, Arquitectura, Pedagogía, Psicología y Sociología, de la Universidad Nacional Autónoma de México.
De acuerdo con los resultados, se observa una tendencia pesimista en las representaciones sociales del cambio climático por parte de los estudiantes, aun cuando también es notoria su preocupación por hacer algo al respecto: se identifican en su gran mayoría actividades de adaptación, y si bien no significa que las realicen, sí se encuentran en sus representaciones sociales. Asimismo, se observan claras evidencias de que el componente emocional está presente en las representaciones sociales.
Las emociones identificadas en los estudiantes, como un componente significativo de las representaciones sociales, plantean una vía alternativa para la actuación de la educación ambiental ante el cambio climático, además de su relación como guía para la práctica.
Esta investigación proporciona elementos para comprender la importancia de la educación ambiental en la formación de los estudiantes universitarios, con base en el reconocimiento de que el cambio climático es, ahora mismo, la principal amenaza para la humanidad; de igual forma, devela el significado de
los factores que originan el propio cambio climático y los efectos que tienen en los ecosistemas.